En el cielo se mueven los astros
pausadamente ,
gira y giran sin encontrase.
Así nosotros como peonza
giramos yendo y viniendo
cada uno con su destino.

Noche de noches es esta noche,
 larga y cargada de misterio.
Alumbra la mansa luz
de una candela .En el espejo de la chimenea
me veo reflejado
sin pretenderlo y
veo mis sienes de ceniza. 

El negro de antes
es un recuerdo más.

Subo las escaleras
y brotan sin pretenderlo
el nombre de amigos,
que muchos e ellos
han volado a la casa del Padre.
Percibo una pena alevosa
que me hiela  la sangre y
quema mis entrañas.
En realidad es la vida corta y rápida.
El misterio de ella
está en saberla vivir entregándola
 al paso del hacer encomendado.