La vigilia de hoy nos prepara para vivir intensamente el misterio del nacimiento de Jesús.Dios y hombre verdadero

El motivo principal de nuestra liturgia es la preparación. Una preparación que ponga en marcha nuestro corazón, no nos suceda como a la gente de su tiempo “Vino a los suyos y los suyos no lo reconocieron”

Podemos imaginar con cuánta preparación interior,
con cuánto amor, esperó María aquella hora. En la que el Altísimo se hizo el Bajísimo, para que el último de todo pueda también encontrarse con él.

! Dios reside en lo alto, pero se inclina hacia abajo
Dios es tan grande que puede hacerse pequeño. !
Dios es tan poderoso que puede hacerse inerme y
venir a nuestro encuentro como niño indefenso para que podamos amarlo. !

Dios es tan bueno que puede renunciar a su esplendor divino y descender a un establo para que podamos encontrarlo.

  • El Creador del universo, el que parece estar lejos
  • Aquél que no tiene igual, que «se eleva en su trono», mira hacia abajo, se inclina hacia abajo.
  • me mira,
  • me transforma a mí y al mundo que me rodea. !
  • Con su mirar hacia abajo,
  • Él me levanta o me toma benévolamente de la mano y me ayuda